Pero, ¿quién regula, quién modera,
quién dice “no te puedes
llamar así”, quién niega la pertenencia
del dominio?… Nadie. A
menos que alguien ya posea el dominio que trabajosamente
se ha
elegido para un negocio u organización.
Así como a un infante se le asienta el nombre
en el registro civil,
los dominios de internet se registran en NIC, la
empresa que por
70 dólares otorga al instante la titularidad
y uso de ese nombre
durante dos años (después se renueva).
Pero ¡cuidado!, porque
cuando algunas marcas bien conocidas quisieron registrar
sus
dominios descubrieron, ¡oh sorpresa!, que
ya tenían dueño. Y no
se trataba de un amigo o pariente. Nestlé,
Panasonic, Yahoo y
otros grandes y pequeños han pasado ese trago.
Yahoo.com.mx quizá sea el caso más
sonado en nuestro país.
Pero no sólo en la familia .com ocurren ese
tipo de divergencias,
sino también en la de las .org; para muestra
basta la controversia
suscitada entre los partidos políticos PAN
y PRD por el dominio
alianzapormexico.org.mx, registrado por la empresa
Multienlaces el
1 de noviembre pasado, cuando los partidos de oposición
todavía
negociaban para formar la malograda Alianza por
México.
La coalición que después se formó
en torno de Cuauhtémoc
Cárdenas retomó lo de Alianza por
México, pero ya no le fue
posible usar el dominio en internet. Estaba cedido.
En un
comunicado de Multienlaces, su director general,
Luis Enrique
Maass Moreno, afirmó categórico que
ni el IFE ni la PGR son
instancias competentes para dirimir el asunto, pero
que si los
asesores del candidato perredista querían
negociar, con todo
gusto lo haría.
“Cuando me enteré del caso, pensé que
alguno de los dos
partidos vendría por aquí con alguna
demanda, pero ninguno se
apareció”, afirma Jorge Amigo Castañeda,
director general del
Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI),
instancia
encargada de registrar todo tipo de marcas comerciales
en
nuestro país y que parece la entidad más
próxima para resolver
ese tipo de inconvenientes.
“El problema de los dominios se da a nivel mundial
y no es
privativo de nuestro país –agrega el funcionario–;
en ninguna
parte hay reglas fijas ni disposiciones claras para
regular y, en su
momento, proteger a los titulares de los dominios.
Tan es así que
quienes otorgan los nombres son organismos privados:
NIC
México, NIC Estados Unidos, etc.”
En algunas naciones, la misma oficina que maneja
los derechos de
autor regula los de propiedad industrial; en este
último rubro está
incluido el tema de las marcas, la competencia desleal
o el
engaño al consumidor. “Lo menciono –subraya
Amigo– porque ese
es el ambiente donde puede caer cualquier deslealtad
referida a
un nombre de dominio”.
Aunque el IMPI no regula a NIC México, le
ha propuesto que antes
de otorgar un dominio consulte el banco de las marcas
registradas
para percatarse si la empresa u organismo que lo
solicita es el
titular de la marca; con ese acercamiento podría
garantizarse que
al menos las firmas más famosas o conocidas
tengan la posesión
de su dominio sin ninguna controversia.
Yahoo vs Interactive
El otoño pasado, el portal multinacional Yahoo!
llegó a México con
el respaldo de una presencia previa en otros 20
países. Era
conocido porque desde Miami tenía su versión
en español y
muchos latinos y mexicanos lo utilizaban; no obstante,
en el IMPI
no estaba registrado, pero en cuanto llegó
a tierra azteca lo hizo
y también se quiso registrar en NIC, sólo
para enterarse de que la
empresa mexicana Interactive Press ya había
solicitado el dominio
yahoo.com.mx desde hacía dos años.
Lo que hicieron los abogados de Yahoo Incorporated
fue entrar en
contacto con Interactive Press para negociar. “Tengo
entendido
que Interactive pidió una suma de 300,000
dólares para ceder el
dominio”, afirma Amigo Castañeda en entrevista
con
InformationWeek México. Después siguieron
las discusiones, se
rompió el diálogo y el portal solicitó
la intervención del IMPI.
Una segunda etapa vino cuando el IMPI otorgó
formalmente la
marca a Yahoo (en realidad son tres marcas). “En
ese momento
solicitamos a NIC la cancelación a Interactive
de yahoo.com.mx
para dárselo al portal”. En franco contraataque,
la mexicana
solicitó a IMPI la “caducidad” de la marca
Yahoo Incorporated,
algo improcedente porque una marca sólo puede
considerarse
“caduca”, entre otras razones, cuando no ha sido
usada por un
periodo mínimo de tres años antes
que entre la demanda,
situación que no se dio con esta firma.
Contra esa resolución, Interactive solicitó
un amparo ante los
tribunales correspondientes. Cuando NIC supo del
amparo
suspendió por siete días el nombre
del dominio a Yahoo,
otorgándole otro que fue mx.yahoo.com para
redireccionar a sus
usuarios y clientes. El IMPI resolvió que
las marcas de Yahoo no
estaban caducas y NIC le devolvió a la estadounidense
el
yahoo.com.mx.
Interactive presentó una nueva demanda civil
en contra de NIC
(sin involucrar al IMPI) y antes de finalizar el
mes de marzo se le
volvió a suspender el dominio a Yahoo; se
negoció y se le
concedió el uso por 30 días más,
en los que la firma americana
pidió al IMPI una demanda de “infracción
administrativa”. El IMPI
quedó de resolver si la mexicana era infractora
o si pretendió con
dolo el bloqueo de una archiconocida marca que en
su plataforma
mundial de e-commerce incluye 10,500 comercios en
línea.
InformationWeek México buscó infructuosamente,
hasta el cierre
de la edición, el dictamen final del IMPI.
En la casa no lo saben
Una cosa es cierta: cuando en México se registró
el dominio de
yahoo.com.mx, la firma que lo hizo ya sabía
de la existencia del
gigante; que por casualidad le haya sonado agradable
para
ponerlo a su empresa es otra situación. Pero,
¿por qué los
300,000 dólares pedidos al portal para cederle
algo que quizás
“por derecho de sangre” le corresponde? Según
algunas fuentes
informadas, la cantidad solicitada podría
haber alcanzado los
700,000 dólares conforme avanzaron las negociaciones.
El director de Yahoo México, Alejandro Cardoso
Mendoza, afirmó
en entrevista desconocer el ofrecimiento y el nombre
de la
empresa que poseía el yahoo.com.mx; todo
lo remite a la
resolución legal. “Para nosotros es más
que suficiente que el
IMPI, desde el punto de vista de propiedad intelectual,
haya
reconocido que quien debe utilizar el dominio somos
nosotros;
posteriormente, NIC en forma individual también
hizo una
evaluación y falló a favor nuestro,
por lo cual este capítulo está
cerrado, al menos en lo referente a la propiedad
intelectual
–comenta el directivo–.No había razón
por la cual un dominio
típicamente utilizado en más de 20
países no se otorgara aquí. En
este momento ya sólo faltan algunos detalles
de orden
administrativo, pero nuestros abogados están
a cargo de ellos.”
Cardoso Mendoza reitera que aunque la corporación
llegó a
mediados de octubre pasado, ya había una
“presencia de marca y
una penetración” en usuarios mexicanos. Según
comenta, Yahoo
es una compañía global de medios de
información en internet,
pero con un enorme sentido local en términos
de adaptación y
sensibilidad. Es la más grande, opera en
22 países y en 11
idiomas, y cuenta con 145 millones de usuarios en
el orbe, los
cuales generaron 625 millones de page views diarios
(promedio)
en el primer trimestre de este año. En dicho
periodo, los ingresos
de la firma ascendieron a 228.3 millones de dólares,
lo que
representa 126% más con respecto al último
trimestre de 1999.
Vivales sin castigo
Marco Antonio Merino, especialista en cómputo
electrónico,
afirma que si no se legisla de inmediato sobre el
derecho de
registrar dominios esa “maña” del bloqueo
empezará a proliferar.
“Cuando comenzó internet, a nadie se le ocurrió
tomar como base
la legislación internacional en materia de
marcas, lo cual hubiera
sido un buen principio. Hoy cada quien registra
lo que se le da su
gana, la palabra compuesta o el término que
quiera.”
Algún vivales puede registrar kokakola.com.mx
y no pasa nada;
no se involucra el concepto de “confusión”
como existe en
materia de marcas. Lo que viene a operar entonces
es un
mecanismo de buena fe; ocurre una “negociación”
entre el
afectado y el bloqueador. Comenta Merino: “Como
propietario del
dominio se lo doy a tu empresa, pero tú me
‘indemnizas’ con una
cantidad monetaria…” No hay una ley que castigue
al
especulador. Lo más grave que puede ocurrir
es que a ese
individuo la firma registrada le gane el pleito
jurídicamente, pero
sin sanción alguna como escarmiento.
Amigo Castañeda habla de la revisión
que recientemente se hizo a
la Ley de Fomento y Protección de la Propiedad
Industrial, que
por vez primera incluye disposiciones para proteger
nombres de
dominio y regulación de comercio electrónico.
“Así, el hecho de
registrar un nombre de dominio con la idea de especular
o
bloquear se considera competencia desleal e infracción
administrativa, y causará una multa hasta
de 20,000 días de
salario”. Cabe destacar que la falta no se considera
delito y, por
lo tanto, el infractor no puede ser encarcelado.
Para desalentar a nuevos aventureros del internet,
Amigo
Castañeda manda un aviso: “Tenga cuidado
cuando registre un
nombre de dominio: que no sea para fines ilícitos,
porque el IMPI
va a actuar y en breve tendrá otras disposiciones
legales que
permitirán resolver con mayor eficacia ese
tipo de casos”.
Si se lo ganan, allá usted
En México se registran más de 2,000
nombres de dominio al mes.
Hasta el 25 de abril, NIC había registrado
40,455, de los cuales
36,805 corresponden a .com.mx. Se habla de cierta
especulación,
pero hasta el momento no se ha confirmado algún
monto pagado
por una corporación para usar tal o cual
nombre que estuviera
apartado por un paciente “vendedor”. Pocos estarían
gustosos de
difundirlo.
De todos modos, si al lector le interesa el impacto
publicitario a
través de internet, apúrese porque
algunos ya escogieron un
espacio que les puede producir muchos page views.
Es el caso de
unos zapatos que no han salido al mercado (al menos
quien esto
escribe no los ha visto en aparador), pero ya tienen
su página:
elefante.com.mx.
Galanes.com.mx también existe, pero vaya decepción
para las
damas porque más bien es para los chavos,
ya que contiene
cromos, modelitos y uno que otro producto farmacéutico.
Condones.com.mx está en el aire, pero no
habla de preservativos
anchos o extralargos; alberga su historia y el método
de
fabricación y uso en la prevención
de enfermedades, cortesía de
Sico.
En tatiana.com.mx se podría pensar en un encuentro
virtual con
la chica que entretiene a los pequeñines
los domingos por la
mañana, pero el redireccionamiento desemboca
en los zapatos
Panam, donde hay botas, tenis y sandalias al gusto
del
internauta. Todoparamicocina.com.mx ofrece vasos,
loza,
cubiertos y vajillas para las amas de casa, que
tal vez rechacen
teclear el nombre por lo extenso. Pantaletas.com.mx
llama más al
morbo que a la realidad: remite a otros sitios con
infinidad de
misceláneas y productos, menos la lencería
que alguien podría
imaginar. En chicas.com.mx hay actrices de buen
ver, como la
Noriega, la Guzmán, “la aventurera”, etc.
Osito.com.mx y chilango.com.mx están eternamente
en
construcción; ¿será que puede
haber postores interesados en
esos sitios?
Hay otros nombres que podrían significar
un golpe de vista y que
aun no tienen dueño, como es el caso de chaparritas,
sobrinas,
pobres, gatos, tacos, etc. Ya no se diga la cantidad
de
combinaciones que pueden hacerse mezclando palabras
y
conceptos sutiles: boquitaspintadas, nochetrasnoche,
buenosmodales, etc. ¿No se anima?, son sólo
70 dólares…